se pueden observar rastros de un ser humano víctima de una crucifixión. Según las creencias católicas es la misma tela en la que envolvieron el cuerpo de Jesucristo en el Santo Sepulcro.
Aseguran que Su imagen se imprimió en el lienzo en el momento de Su resurrección. La tela ha pasado por muchas pruebas e investigaciones científicas, incluso las pruebas del Carbono 14 pero todavía sigue siendo un enigma. Unos de los científicos afirman que la origen de tela data del siglo XIV y que este misterio es una manipulación de la iglesia católica.
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